A pie de la Autovía de Andalucía N4 A5 y en el punto kilométrico 475, se encuentra el Castillo de la Monclova, dispone de un acceso privado y asfaltado, rodeado de un bosque de árboles y plantas centenarias, la carretera principal que llega al castillo, dispone a ambos lados una frondosa vegetación con árboles de Acacias, formando un túnel tupido con esta especie.
La entrada de los invitados, se realiza por la carretera principal del Castillo, donde las copas de las Acacias forman un túnel tupido, un bosque de árboles , plantas centenarias, y una frondosa vegetación , desembocan en los jardines del Castillo, pasando por una cancela de forja, donde se accede a un camino con faroles antiguos, palmeras entre otras variedades.
La suite, llamada “La Casa Del Obispo” data del siglo XVI, está ubicada junto al Castillo y sus jardines, su origen y construcción fue para el hospedaje del Obispo de La Monclova, que por entonces era Condado y por ello tenía Obispado, posteriormente hacia finales del el siglo XVII tuvo un cambio de uso y pasó a ser bodega del antiguo molino de aceite. También se ha empleado como vivienda de los antiguos trabajadores, que vivían con sus familiares en la propia finca. Está construida con doble arco de medio punto, con ladrillo de barro de estilo ecijano y sobre estos se repiten los arcos en la parte superior, dispone de un espacio de 100mts cuadrados, es diáfana a excepción del cuarto de baño. La decoración y mobiliario es del siglo XVIII. El entorno te hace trasladar a una época pasada, siendo ésta, una experiencia única e inolvidable.
La “Casa de los Invitados” se encuentra junto a los jardines del Castillo. Está construida en el siglo XIX y dispone en dos plantas y las siguientes habitaciones: tres dormitorios, dos cuartos de baños y una sala de estar. El silencio y tranquilidad que se respira, en un entorno de naturaleza, ayuda al descanso de la vida cotidiana.
Este espacio como su nombre indica, era una antigua huerta que abastecía de verduras y hortalizas a las familias que trabajaban y vivían en Monclova. Hoy en día es un lugar creado para disfrutar de él, en los distintos eventos que se organizan, pues su amplio espacio de aproximadamente 20.000m2 y su espesa vegetación y plantas como Las Adelfas Nerium Oleander, Rosas Paeonia Broteri de distintos colores y arboleda autóctona como el Olmo Ulmus Nigra, Moreras Blancas Morus Alba, Moreras Negras Morus Nigra, Palmeras Phoenis Canariensis, Árbol del Amor Cercis Siliquastrum, Cipreses Cupresus Columnar, Olivos Olea Europea y otra arboleda no autóctona como La Melia Melia Acedarach, Palmeras Phoenis Wachingtonia, o el Limonero Citrus Limón, crean un ambiente de naturaleza idóneo para que el evento que se realice sea único.
El Castillo, está rodeado por un extenso y variado jardín compuesto de una variedad de arboles, plantas y flores ornamentales de distintas variedades y gran colorido.
Para ello disponemos de un personal cualificado y dedicado exclusivamente a su conservación y mantenimiento. Hacen de él, un espacio único y exclusivo en la campiña sevillana.
Este hermoso patio, rodeado de cristaleras de medio punto rebajado, dispone en el centro de una fuente circular, un pilón con busto y azulejo en memoria de Garcilaso de la Vega. Bajo tres arcos de medio punto se alberga una Calesa tallada y policromada, única por su origen e historia, espacio éste, decorado con un repostero de estilo barraco datado de finales del siglo XVIII que dispone de una rica ornamentación, destacando el óvalo central, donde se aprecia los escudos de armas la familia Arteaga y Señor de Lazcano.
También destacan trasportines de época, arriates con árboles y plantas ornamentales decoran el patio. Una terraza en uno de sus laterales, con bustos en piedra de los antepasados de la familia Arteaga, escalera con azulejo decorativo y barandilla de forja, le ofrece unas de las vistas más maravillosas, como fondo las espadañas y la torre del homenaje.
El salón de los tapices, dispone de cristaleras de medio punto rebajado con vistas al patio del molino, siendo muy luminoso, está decorado con tapices del siglo XVI, repostero tejido a mano y mobiliario de época, entre otros, un bargueño bajo un arco de medio punto de fabrica de ladrillo y con escudo heráldico de la familia Arteaga.
Este Antiguo Molino, que aun posee las piedras cónicas llamadas de Rulo, data del siglo XVIII, hoy en día, una vez restaurado es una pieza de museo. Las obras de rehabilitación efectuado al edificio, junto a la decoración de Lienzos, Tapices y Mobiliario que en él alberga, hacen de este lugar un referente para las visitas guiadas y celebración de eventos.